Seamos sinceros. Yo a este disco le tenía mucho miedo. Miedo de escucharlo y no escuchar metal. Pero siguen vivos, y es que el quinto trabajo de los finlandeses es un disco que me ha sorprendido positivamente dadas las expectativas que tenía. No os voy a mentir, no es el mejor disco de su carrera, pero al menos es algo diferente. Es, ante todo, un disco de experimentación.
El grupo liderado por Tony Kakko intentó desmarcarse de su etiqueta de grupo power de doble bombo y muchos teclados y lo consiguieron. Unia es un disco mucho más complejo que cualquiera de los anteriores. Las canciones están formadas por partes diferentes que fluyen sin cesar. Las melodías, los arreglos y sobre todo la estructura de las canciones son mucho más complicadas que en anteriores trabajos. En general, es menos cañero y rápido, pero sigue teniendo ese “toque Sonata”. Como he dicho antes, Unia es un disco casi experimental, como si hubiesen decidido probar cosas nuevas para escuchar el resultado, y hay cosas que han salido bien y otras que no tanto.
Siguen habiendo algunas canciones cañeras, que recuerdan más a la Sonata Arctica de los viejos tiempos, como The Harvest (buenos solos de guitarra y teclado) o It Won’t Fade (una de mis favoritas del disco). Del disco destacan dos canciones por encima de las demás. Una es My Dream’s But a Drop of Fuel for a Nightmare, una canción casi tan compleja como su título, que arranca como una balada al piano que va cogiendo velocidad y fuerza para explotar en una sucesión de secciones realmente brillante de principio a fin, una delicia para el oído. Pero la auténtica joya de este disco es Caleb. Este corte es la continuación de The End of this Chapter, de su segundo disco, Silence. Caleb es, sin duda, una canción mágica, de las que te pone los pelos de punta. Melodías llenas de melancolía, tristeza o rabia se van sucediendo creando un clímax que te hace escucharla una y otra vez. No me canso de oírla, es una preciosa obra de arte. Pero no todo el disco es así. Hay canciones que no acaban de funcionar, como For the Sake of Revenge (la distorsión del bajo la estropea) o The Worlds Forgotten, the Words Forbidden (que no llega a ser un interludio pero le falta algo para ser una canción buena), y sobre todo la ausencia de una buena balada como nos tenían acostumbrados, ya que ni Good Enough is Good Enough y sobre todo Under Your Tree llegan a dar la talla.
Esperemos que vayan tomando buena nota de los resultados de este disco, que incorporen lo que suena bien en los siguientes y vayan descartando lo que no acaba de sonar, construyendo así un sonido aún mejor. Os dejo con el single que sacaron del disco, la canción Paid In Full:
2 comentarios:
Pues a mi est disco tb me gusta muxo. Aunk la 1ª vez k lo oí me lleve un chasco, todo hay k decirlo, xk me sonaba super raro... Lo abandoné un par de meses, y una dia x k si me dio x volverlo a scuxar... Y ya no pude parar... Me encanta! :) Soy la bixiya rara nº 2 xD
PD: K wapo es mi Tony! ;p
Una cosa...
¡CAMBIA LA HORA K ESTA FATAL!
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